Hay un viejo refrán que reza “no comas pan delante de los pobres”. Pues, la inobservancia de ese adagio causó, en gran medida, la felonía que le hicieran Ana Bouche a su exjefe, Alejandro Moncada Luna; y Vicente Caballero a su exjefe, Víctor Benavides.
En el caso de Ana Bouche, mano derecha del entonces magistrado Alejandro Moncada, aquella decidió traicionarlo mediante la venganza: Cuando Moncada abandonó la Presidencia de la Corte, éste no pudo mantenerla en el puesto de Coordinadora de Presidencia de la Corte, por lo que Bouche le pidió ayuda ante la inminente “botada” que le daría el entrante José Ayú Prado. Fue ahí cuando Alejandro le responde “lo siento, ese no es mi problema.”
Esto generó rabia y animadversión de parte de Bouche hacia su jefe, quien no pudo resistir que Alejandro siguiera ganando dinero mientras ella entraría a la lista de desempleados. Fue entonces cuando aprovechó la oportunidad de descargar su rabia contra Alejandro, al ser pieza clave en el caso que se le siguó en la Asamblea Nacional al expresidente de la Corte, que decantó con una condena en prisión en El Renacer.
CON BENAVIDES
El tema con el magistrado Benavides es un poco más complejo. El señor Vicente Caballero,
entonces jefe de escolta de Benavides, al ver que su jefe recibía casi diariamente 15 mil a 20 mil dólares por venta de fallos, decide que él también quería ser partícipe de la danza de billetes.
Planifica junto con su hijo un secuestro a la anciana madre del Magistrado; secuestro que le salió fallido, y que culminó con una larga condena en prisión.
Vicente Caballero, exjefe de escolta de Benavides |
Desde la cárcel, decide que si él no pudo disfrutar una vida de rico como su exjefe Benavides, este tampoco lo haría. Así que graba un video en el cual denuncia que Benavides vendía fallos y que mantenía relaciones pederastas con menores de edad hombres…
¡Qué feo!
Y por lo visto el plan fraguado por Vicente Caballero le está saliendo victorioso, por ahora, ya que la imagen de Benavides ha sido FUERTEMENTE mancillada, principalmente, a juicio mío, por el tema de que pagaba a chiquillos por sexo. ¡Qué asco! No se ve tan viejo y espantoso como para andar de viejo verde homosexual y pedófilo (a esto me refiero, así comentarán de él a causa del deterioro de su reputación)…
CONCLUSIÓN
La envidia es uno de los sentimientos más crueles que puede albergar el ser humano; ya que es capaz de generar traiciones. Tanto Ana Bouche como Vicente Caballero fueron manipulados por la maldita envidia, maldita envidia que desbarató la vida de sus entonces jefes, quienes radicaron su confianza en estos traidores. ¡Nunca comas pan delante de los pobres, y si lo haces, dales una tajada del pan!
Kevin Moncada-Luna Follow @Kevin_Moncada
No hay comentarios:
Publicar un comentario